El Cristiano y el Aborto

 

DECLARACIÓN CRISTIANO-EVANGÉLICO-BÍBLICA DEL INSTITUTO PROSOCIAL Y CULTURAL DEL MERCOSUR CON SEDE EN BRASIL

Así como el que recibe el IFE legítimamente u otro auxilio del Estado lo entiende, como no entiende el que nació rico y nunca necesitó un empleo ni usar la cabeza para inventar una fuente de trabajo lucrativo, también la mujer que se encuadra en las probabilidades de haber necesitado una despenalización del aborto, o que ve la necesidad de estar preparada ante las inseguridades de la vida.

Me refiero a mujeres que no tienen cultura de “congregarse” en ninguna iglesia, y carecen de un hogar y una familia bien estructurada y sana. Las familias de los pañuelos celestes nunca debieran preocuparse por tal despenalización. Pues, se entiende que los reclamos al Estado, en Democracia, corresponden a personas y colectivos sociales vulnerables y hasta abandonados, y que los cristianos estarían viviendo en perfectas condiciones de ser sal de la tierra y luz del mundo.

También, se supone, que así como la Iglesia en sus comienzos vivía, al ser perseguida dijo que tan sólo desobedecerían al Gobierno Civil si buscase que desobedecieran a Dios, la despenalización del aborto, no atentando contra “La Iglesia”, y ni obligando a sus miembros a abortar, en este caso, no hay porque contrariar al Estado. Los cristianos han sido pasivos en someterse al dios dinero, llamado en griego de la Biblia MAMÓN, y eso sí fue y es contra el Cristo de su Fe. Si hay referentes involucrados en una nueva ley punitoria y censuradora de sus deberes profesionales, como médicos, escribanos, y líderes religiosos, son ellos los que deben pelear por sus derechos, o buscar otra salida aún más justa y propia.

Se sabe que el problema de la injusticia social es universal y atraviesa todos los tiempos y todas las civilizaciones, pero alguna mente macabra idealizó en la trascendental Revolución Francesa Derecha e Izquierda. Si a los políticos esto sirve, hasta ahora no hay ninguna obligación de derechista votar en derechista e izquierdista en izquierdista. Por lo tanto, no nos debe preocupar esa separación, y si por un lado debiéramos erradicarla de nuestro imaginario social, convicciones y posiciones políticas, por otro, educarnos lo bastante como para no dejarnos engañar.

La despenalización del aborto, así como todo lo que en las últimas décadas surgió como recuperación de Derechos Humanos, está siendo utilizada malignamente por la Derecha para demonizar a la Izquierda. Esto está tan “nublado”, que muchos no perciben que estar en contra de tal despenalización favorece a la Izquierda, y estar a favor de la despenalización del aborto favorece enormemente a la Izquierda.

Pues, la Izquierda, para llegar a Gobierno, permanecer y triunfar, necesita de la carencia de Derechos Sociales satisfechos, mientras que para su éxito, la Derecha necesita del fracaso de la Izquierda para entrar y quedarse, mientras lucran; o en su defecto, provocar la demonización de sus adversarios, y en el Poder, sistematizar la insanidad de los más ancianos, la peligrosidad de los más pobres, y la incapacidad para cambiar y auto-gobernarse.

La Biblia no ignora el aborto, pero más se opone al abuso de la mujer por el hombre, en cuyo concepto entra principalmente la fornicación, el consumismo, la prosperidad del mercado bajo el dominio de MAMÓN, y la esclavitud. Y tal vez un quinto mal, el rigor moralista y religioso. Se sabe que este último factor genera justamente lo que reprime. En donde más se prohíbe, más se practica clandestinamente.

¿Por qué en las últimas décadas tantos pastores evangélicos famosos cayeron en el adulterio? ¿Y por qué tantos padres católicos practicaron el estupro? No se trata de hipocresía; muy por lo contrario, por ambos lados de La Iglesia se buscó y busca la mejor moralidad posible, sólo que ningún hábito, ninguna cruz, ninguna Biblia, ningún diploma religioso y ningunas de las moralidades más conocidas, principalmente la imperante por acuerdo social, y la militar, son suficientes para preservar a las personas socialmente morales y correctas.

Cuando un Gobierno hace campaña de entrega gratuita de profilácticos, tampoco estaría promoviendo la fornicación, sino por el contrario, comenzando a prevenir mayores males de una raza humana caída, perversa y corrupta. Otra vez dejo afuera de mi juicio a los “cristianos”, sin embargo, ellos siguen siendo malos ejemplos. El Gobierno sólo cumpla con su deber social de prevenir, pero no puede controlar y punir coitos furtivos de los ciudadanos.

Por más de un siglo los más ricos del mundo [mayoría de Derecha política], han promovido el consumismo, y cuando todo excede, la culpa la tiene el pobre “consumidor” o el Gobierno de la otra vereda. La Era Industrial cambió casi toda moral en el mundo. Lo que para muchos grupos sociales significó liberación y empoderamiento, para la sociedad por entero [ricos y pobres; mujeres y hombres, principalmente], es generación de Derechos Humanos. Las filosofías capitalistas [y el socialismo también es capitalista], provocan una ebullición humana incontrolable que resolver y satisfacer, mucho más cuando prevalece sobre el Capitalismo de Cooperación, el Capitalismo de Exploración,  y el de Especulación, y su resultado siempre fue la esclavitud y sigue siendo la dependencia ciudadana del Estado. 

Lo que en la sociedad mundana se llama Reserva Moral, la Biblia le denomina Remanente Fiel. Ante cualquier posibilidad de invasión de la esfera privada por la esfera pública, el Gobierno, las TIC, VIVA lo que quiere cambiar en el mundo, y defienda lo que VIVE, no lo que otros impostan querer vivir y defender, ni tampoco lo que otros colectivos humanos buscan liberar, y si va a hacer ciudadanía responsable, VOTE a conciencia, pero sepa anticipadamente, que lo que hacen los Gobiernos no es ni culpa ni mérito del individuo votante, ni su deber hacer bien o corregirlo. Y que los verdaderos cristianos y evangélicos, además de VIVIR la moral propia, EVANGELICE a tiempo y fuera de tiempo, lo que implica decir: Llame a Dios a todo co-ciudadano, tenga misericordia y compasión de todos, ámelos tal cual son, cuide-los con empatía, escucha profunda, paciencia y solidaridad, y lo demás dele a la conciencia ajena, al Estado, y a Dios.

Dr. Tito Berry