El Lugar de la Iglesia

 

Siguiendo Verdades Relativas y Verdades Absolutas ya publicado en el blog del IPCM, antes de comentar otras verdades absolutas en la Biblia, tengamos en cuenta la principal, que es la mismísima persona bendita, divina, perfecta y eterna llamada Jesucristo.

La Iglesia ocupa una esfera en la persona de La Verdad, pero un día será juntamente con Él, La Plenitud. Esto no quita que ella sea Columna y Baluarte de La Verdad, pues, en esencia, es el mismo Cristo. ¿Acaso Cristo es apenas Cabeza, o también Cuerpo? El problema no es La Iglesia que, como Cuerpo de Cristo, nunca se separó de Él, sino los miembros de Cristo que deambulan por ahí fuera de la Esencia y el Principio de la Vida.

Dios creó a Adán y Eva. Luego les dio el poder de crear más personas. Todo creyente en Cristo Jesús tiene en esencia la misma facultad de Él por “hacer iglesias”, pero como de Adán se dijo, “a su semejanza, conforme a su imagen” [Gn. 5.3].

El detalle está en que los hombres hacen sus propias iglesias, mientras Cristo EDIFICA SU IGLESIA. Ellos ENGENDRAN iglesias. Cristo EDIFICA la suya. Hay muchas diferencias que considerar. Examinemos apenas algunas:

Cuando engendramos un hijo, como Adán, nos sentimos sus dueños. Cuando Cristo edifica su Iglesia, toma hijos humanos y los va incluyendo como miembros de Su Cuerpo, y los hace en conjunto una asamblea, para finalmente ser Su esposa.

Dios nos da la VIDA, y nos delega la facultad de generar hijos, para luego recibir de los humanos hijos suyos, como Herencia de Jehová que el humano le da [Sal. 127. 3]. Desde el principio, Dios trabaja con el humano, por amor. Generar un hijo puede no ser por amor, pero edificar Su Iglesia, significa INCLUSIÓN, que sólo acontece POR AMOR. Nosotros generamos delincuentes, y Dios dice: <<Quiero tu hijo para Mí>>. Y le hace Su Iglesia. Es como si nos dijera: Dámelo, y deja que yo lo arreglo, le transformo, y le incluyo a Mí. A final, Él se hizo hombre sin el semen de José ¿no podrá hacer Hijo de Dios a un hijo de pecador? ¡Sólo EL AMOR puede hacer tales proezas!

Mateo 12. 30 no endosa los milagros como credencial de SER IGLESIA. Las personas pueden hacer milagros, sin ser Iglesia. Ser Iglesia aquí es SER UNO CON CRISTO. Ser uno con Cristo es estar yuxtapuesta permanentemente en el Plano Eterno de Dios. Cristo vino en el PED, vivió en el PED, murió, resucitó, ascendió, y vendrá en el PED, para la consumación del PED. ¿De qué sirve hacer milagros transitando otro camino diferente del PED?

Juan 17. 22-24 dice: “Y la gloria que me diste, yo les he dado; para que sean uno, como nosotros somos uno. Yo en ellos, y tú en mí, para que sean perfeccionados en uno; y para que el mundo conozca que tú me enviaste, y que los has amado como también a mí me has amado. Padre, aquellos que me has dado, quiero que donde yo estoy, también ellos estén conmigo; para que vean mi gloria que me has dado; porque me has amado desde antes de la fundación del mundo”.

Este texto contiene dos bases para SER IGLESIA: 1) SER UNO; 2) ESTAR EN LA GLORIA DEL CRISTO GLORIFICADO. Los creyentes, de modo general, y las “iglesias” de los hombres, quieren la gloria de Cristo, pero dicen que la unidad jamás acontecerá. Se conforman con la gloria denominacional, por doctrina o tradición, y no buscan la gloria eterna del Hijo de Dios. Sin embargo, aquí la unidad, y aún más, la UNICIDAD de ellos, es una de las piernas del mover de Dios en la Tierra desarrollando su PED: Plano Eterno de Dios. Ser UNO POR CIUDADES, como está hartamente diseñado en el Nuevo Testamento. Él no vino para darnos la idea de que cada uno pueda hacer su propia iglesia, crear su propio camino.

Apocalipsis 17. 14: En el futuro, ese UNO POR CIUDADES será el conjunto de hallados fieles. “Ellos pelearán contra el Cordero, y el Cordero los vencerá, porque Él es Señor de señores y Rey de reyes; y los que están con Él son llamados, y elegidos, y fieles”. No serán los de la Iglesia Católica, ni de una de las protestantes, ni todas ellas juntas, ni una de las nuevas sectas que se arrogan la personalidad y la exclusividad, como el Adventismo del Séptimo Día, la Iglesia de Dios Internacional, la Iglesia de Dios Todopoderoso, y la del “Recobro del Señor”, sino los DEL CORDERO. Un día fuimos llamados. Hoy Él nos está escogiendo por alinearnos en su PED, y mañana nos declarará FIELES.

Concluyendo esta síntesis: EL LUGAR DE LA IGLESIA ES: 1) Ser UNO con Cristo; 2) Estar en la Gloria del Cristo Glorificado; 3) Estar yuxtapuesta permanentemente en el Plano Eterno de Dios; 4) Ser UNO por ciudades;  5) Ser hallados Fieles al Cordero, o sea, el Remanente Fiel para ser Su Esposa, virgen, pura, incontaminada de fornicaciones y adulterio espiritual. Cuestión de VIDA-AMOR-LEALTAD, y no Doctrinas y Conocimientos.

Tercera Parte:

Arreglando Desacuerdos, para la Unicidad [Filipenses 4:1-23].