Los verdaderos matones de la humanidad

 

 

Putin frente a la hostigación estadounidense

Un lado demasiadamente hostil de la humanidad hoy, no es ni las provocaciones militares de los EUA y la OTAN asfixiando a Rusia, entre cuyas estrategias estuvo y está forzar la entrada de Ucrania a la OTAN para que sea servil a ambas unidades de Poder Mundial, los EUA y la OTAN, ni los factores económicos. El peor de los factores provocadores de la guerra e incitadores a que Rusia pierda la paciencia, y reaccione, para ellos tener más motivos de hundirla, es que se valen de viciados en droga, la droga y el narcotráfico mismos y los neonazis, en todo el mundo.

Y de esto Putin está curtido, y tiene muy presente la historia rusa en manos del nazismo, y sabe muy bien que algunas potencias y en general los gobiernos del mundo se están valiendo en demasía del narcotráfico, y tanto él mismo, como a su región ve asfixiados.

Ciertos colectivos en el mundo, y hasta ucranianos, argumentan que Putin busca expansión e imperialismo. Esto es falaz. Putin también siempre fue muy consciente de que está en tercero o cuarto lugar entre las potencias, y sólo reacciona por asfixia. Por qué la OTAN y los EUA no le cercan y asfixian a Israel? Porque son aliados en Capitalismo, y entonces, ellos siempre tratarán de destruir a China y Rusia principalmente. Por qué China está en silencio, prácticamente porque quiere dar certeza de que el Comunismo no quiere guerra. Sólo quiere ser respetado, pero los EUA y la OTAN son los únicos y verdaderos expansionistas que hacen injerencia en países ajenos, y los asfixian hasta que se doblen de rodillas ante ellos.

Los argumentos que usaron los gobiernos que no apoyaron ni a Rusia ni a Ucrania, respecto de diálogo, son eufemismos interesados en sí mismos, como las siguientes palabras del candidato a Presidente por Brasil Lula da Silva: "Los seres humanos tienen que entrar en razón y resolver sus diferencias en una mesa de negociaciones, no en los campos de batalla", y los de Alberto Fernández y decenas de gobernantes en el mundo. No nos engañan. Defienden su propio futuro, pues, no han de ser desconocedores de que Putin cansó de buscar diálogo, hasta hoy mismo, pero aunque Volodomir Zelensky no es libre para pensar, pues, pertenece al colectivo de los drogadictos, y neonazis, los EUA le alientan a no bajarse, lo que una vez más prueba que los diálogos cada vez se hacen menos fructíferos en un mundo donde hasta la Derecha es neonazi y drogados, y la Izquierda se llena de viciados en drogas.

No le pidamos a Putin ser más santo que algunos pocos pastores que viven completamente por la vida. Si quieren moralismo, Putin los tiene mucho más que Biden. Si quieren defensa de valores y principios, Putin lo vive mucho más que la totalidad de los Neoliberales del mundo. Si quieren paz, desde la caída de la URSS los comunistas ya no son los mismos, y son tan mejorados, por lo menos en Rusia, que le superan colosalmente a los EUA. Y si no quieren expansionistas, empiecen por manifestarse en contra de las intervenciones de los EUA e injerencias en 1775-1776: Canadá y Atlántico; 1798-1800: Mar Caribe y Atlántico; 1831: Argentina; 1846-1848: México; 1852-1853: Argentina; 1853: Nicaragua; 1854: Nicaragua; 1855: Uruguay; y en contra de las sanciones en Cuba, Venezuela, y sus Golpes de Estado intentados recientemente en Bolivia, en Venezuela, en Argentina, y su connivente usurpación de nuestras Malvinas, entre decenas de otras naciones soberanas e independientes.

Los pueblos están aprendiendo, y muchos de sus gobernantes también, que la Derecha Extrema Internacional en su última y actual versión ya no se importa más de protocolos y diplomacias, y prácticamente cancelaron las guerras frías, porque descubrieron que pueden vencer y dominar el mundo con lawfare, drogas y neonazismo explícito, y no esperen que aquellos permanecerán pacíficos y dialoguistas, ni siquiere quienes usan en estas emergencias del eufemismo del diálogo y la paz, haciendo guerra al priorizar Ucrania e inocentar a los verdaderos matones de la humanidad, la OTAN y los EUA.

Tito Berry